Las personalidades son como sombras. No pueden encontrarse, no pueden mezclarse, porque no existen. Las personalidades son falsas. Por eso en todo el mundo la gente habla del amor, pero no hay amor. Hablan de amistad, pero no hay amistad; incluso hablan de confianza. Pero para eso se necesita una individualidad tremendamente poderosa. Las personalidades no pueden confiar; siempre tienen miedo, miedo de que su realidad quede expuesta, de que sea conocida.
En lo que incumbe a mi gente, no hay problema; no se trata de luchar por la individualidad. Yo os declaro individuos, vuestra individualidad no es ningún problema; no tenéis que protegerla. Podéis mezclaros y juntaros, podéis ser amigos, podéis ser amantes. Podéis trabajar juntos; podéis trabajar unos a las órdenes de otros sin ningún miedo porque habéis renunciado a la personalidad, que siempre tiene miedo. Ahora tenéis una individualidad, una roca sólida que no tiene miedo.
Osho